
La intensa coloración roja que tomaron las aguas de una represa, ubicada en la zona de La Jarilla, localidad ubicada a unos 22 kilómetros al sur de Chepes, llamó la atención a vecinos y productores ganaderos del lugar. Después de casi una semana de averiguaciones, inspecciones y pruebas mediante la utilización de un microscopio, hoy se conoció las causas de lo ocurrido.
El tono entre rojizo y rosáceo que presenta la represa antes mencionada, es consecuencia de la proliferación puntual de un tipo de alga microscópica, según pudo saber el diario digital El Cronista Chepes. Esta información se conoció mediante un video difundido en su cuenta de Facebook por parte del comunicador social Joni Ibáñez.
El joven chepeño, luego de conocer lo ocurrido en esa represa, inmediatamente viajó al lugar para tomar muestras, con el objetivo de realizar un análisis a través de un microscopio
“No se trata de glóbulos rojos de animales, eran microorganismos vivos- microscópicos. Lo que parecía sangre, en realidad son algas rojas, microorganismos que tiñen el agua”, indicó el comunicador.
Este fenómeno biológico, según explica Ibáñez “aparecen cuando se combinan calor, sol y nutrientes en el agua.
La proliferación de estas algas de pigmento rojo hace que el color del agua de la represa se vuelva roja, un color parecido a sangre animal.

